¡Proletarios de todos los países, uníos!

Compañeras,

Acabamos de enterarnos del asesinato de nuestro compañero Jesús Manuel García Martínez "Chu Pau" en México. Queremos aprovechar esta oportunidad para condenar las políticas genocidas del viejo Estado mexicano, sus fuerzas armadas y policiales, las organizaciones paramilitares y los capos de la droga, que no son más que sus contrapartes reaccionarias, encabezadas por el cínico y demagogo Andrés Manuel López Obrador, quien es así el máximo responsable de la cruel y bárbara guerra contra el pueblo mexicano. El régimen de MORENA es en realidad un lacayo del imperialismo yanqui.

La guerra contra el pueblo es parte de la estrategia contrainsurgente del viejo Estado y entra en escena como una nueva ofensiva reaccionaria para tratar inútilmente de ahogar en sangre y fuego la rebelión antes de su alumbramiento. Esta guerra con el ejército en las calles, no es más que una reedición de la guerra sucia y su combate a la guerrilla, tales como la represión selectiva, la detención-desaparición forzada y las prácticas de “quitar el agua al pez” (utilización de programas asistenciales y corporativistas para restar base social al movimiento democrático-revolucionario) o “introducir un pez más agresivo en el agua” (utilización de grupos de choque, del narco o paramilitares para disputar los territorios controlados por el movimiento democrático-revolucionario).

La guerra contra el pueblo en México ha dejado hasta el momento más de 100 mil personas desaparecidas (desde 1964 hasta la fecha), al menos 400 mil desplazamientos forzados, aproximadamente 500 mil asesinados, y actualmente varias decenas de presos políticos opositores al régimen. Otros fenómenos como el feminicidio y la trata de personas reflejan nuevos aspectos de esta guerra reaccionaria; las mujeres y especialmente las mujeres de clase trabajadora son raptadas, torturadas, violadas y asesinadas en total impunidad (aproximadamente 12 mujeres por día) y cientos de personas que viven en la miseria absoluta, especialmente inmigrantes, son raptados, esclavizados o vendidos por el crimen organizado y utilizados para sembrar, transportar o experimentar drogas, como sicarios mediante la lleva, como mercancías en la prostitución esclavista o el adiestramiento de torturadores, etc. La guerra reaccionaria que se vive en México está apuntada contra la clase obrera y las masas populares, jamás alcanza a los grandes ricos y es, por tanto, una política de Estado contra los explotados y oprimidos.

Los reaccionarios mexicanos apuntan especialmente contra nuestros compañeros de la Corriente del Pueblo Sol Rojo. Han sido detenido arbitrariamente, objeto de tortura y tratos crueles en penales de máxima seguridad; posteriormente tras la desaparición forzada de compañero Sernas,el asesinato de Comandante Gato la férrea represión contra los luchadores que defienden las tierras comunales del pueblo Binniza´ (zapoteca) y se opone al Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec (CIIT) – llegando a asesinar vil y cobardemente el compañero Jesús Manuel García Martínez "Chu Pau" el 27 de octubre último. Y sigue la nefasta campaña de persecución y aniquilamiento contra los compañeros, porque estos, enarbolando coraje y firmeza revolucionaria, no se dejen aterrorizar o doblegar, sino se ponen cada vez más fuertes en pie luchando contra el viejo Estado mexicano y todos los lacayos del imperialismo.

Es necesario denunciar que la “guerra contra el narco” no es más que otro nombre para la guerra contra el pueblo), tanto por el poderío alcanzado por los grupos narco-paramilitares asumiéndose en señores de la guerra con territorios, bienes, recursos y ejército propios (balcanización) – es política planificada del imperialismo yanqui.

Evidentemente la Corriente del Pueblo Sol Rojo no es la única formación de izquierda bajo el asecho del viejo Estado. El EZLN, el CNI-CIG y otros procesos democráticos también enfrentan situaciones similares. Levantones, desapariciones, prisión política, asesinatos y cercos militares se desenvuelven en todos los territorios donde el movimiento democrático-revolucionario tiene presencia. En ese sentido también expresamos nuestra solidaridad internacionalista con esos movimientos y particularmente en esa ocasión condenamos el asesinato, ocurrido el 26 de octubre, del compañero Filogonio Martínez Merino.

Los Estados Unidos son el imperialismo que principalmente oprime al pueblo mexicano, pero nos toca muy especialmente condenar el imperialismo alemán que también chupa la sangre de las masas populares del país. Los grandes monopolios del capital financiero alemán están todos presente en una o otra forma en México y hacen inmensas ganancias, incluso participan directamente en los tristemente celebres “Mega-proyectos” - como es el caso del cínicamente denominado “Tren Maya” – que constituye un ataque directo a la vida de miles y miles de campesinos mexicanos. Nos comprometemos a luchar cada vez más tenazmente contra esta bestia imperialista.  

Compañeras,

nos toca desenvolver la lucha contra el imperialismo y el patriarcado, y como parte de eso llamamos a todas las mujeres revolucionarias a ponerse en la primera fila del trabajo de solidaridad clasista con nuestras compañeras y nuestros compañeros en México.    

¡ Honor y gloria al compañero Jesús Manuel García Martínez!

¡Abajo el imperialismo alemán!

¡Viva la Corriente del Pueblo Sol Rojo!

Comités de las Mujeres Rojas de Alemania

Noviembre 2022